La liga francesa se va a pique tras la salida de Kylian Mbappé del PSG. La marcha de su principal y, prácticamente, única estrella, ha dejado un panorama desolador para el campeonato galo. Esta semana se ha cerrado el acuerdo de la venta de los derechos de televisión de cara a la próxima temporada 2024-2025 y la Ligue 1 ingresará sólo 500 millones de euros en su mercado nacional, cuando hace apenas cuatro años valía 1.153 millones.
La devaluación de la Ligue 1 ha sido progresiva en los últimos años y, ahora, sin Mbappé, se ha desplomado aún más. La forma más sencilla y real de medir el valor de la competición es a través de lo que pagan por ella los operadores. El pasado domingo, la liga francesa conseguía por fin, tras meses de dura negociación, cerrar un acuerdo con DAZN y BeIN Sports, a cambio de 500 millones.
Se confirma así el hundimiento del fútbol galo, puesto que se ha desplomado más del 50% en sólo cuatro años. En 2020, Mediapro se hacía con los derechos a cambio de 1.153 millones. Cierto es que la empresa que dirigía entonces Jaume Roures se negó a abonar después esa cantidad, en plena crisis por el coronavirus y el acuerdo terminó rompiéndose.
Desde entonces, los problemas no han parado de sucederse, con créditos infinitos solicitados por la LFP francesa para salvar el fútbol de nuestro país vecino. Pese a que la situación económica de los clubes y de la Liga era cada vez peor, han conseguido sobrevivir a costa de las grandes estrellas que estaban en el PSG, como Messi, Neymar y, sobre todo, el ídolo local, un Kylian Mbappé sobre el que se sustentaba la supervivencia financiera de todo el campeonato.
La liga francesa se hunde sin su estrella
De hecho, el pasado año, ya sin Messi ni Neymar, consiguieron obtener un total de 700 millones de euros por los derechos televisivos. Pero esta temporada tocaba de nuevo negociar. Las pretensiones iniciales de la Liga hace unos meses eran los de colocarlos por 1.000 millones de euros. Todo, a pesar de que se sabía –aunque entonces no era oficial– que Mbappé no seguiría. Lógicamente, nadie accedió a abonar una cifra ni similar.
Bajaron las intenciones a 700 millones, pero tampoco. A eso se sumaba que el histórico operador del fútbol francés, Canal+, ha decidido dejar de emitir la Ligue 1, por lo que no pelearía por hacerse por los derechos. Tocaba entonces encontrar a quien sí estuviera por la labor de hacerlo. Entonces, han aparecido DAZN y BeIN Sports. La plataforma de contenido multideportiva ha ofrecido 400 millones por un paquete, mientras que la empresa qatarí ha dado una cifra simbólica de 100 millones por emitir sólo un partido por jornada.
Acuerdo de larga duración
Con el objetivo de frenar, de momento, la devaluación, han alcanzado además un acuerdo de larga duración. Los clubes franceses recibirán esos 500 millones por temporada hasta 2029, cuando finaliza el acuerdo. Dentro de cinco temporadas, la competición deberá volver a acudir al mercado audiovisual a negociar de nuevo la venta de derechos. Quién sabe si para entonces podrán contar con un nuevo reclamo que les lleve a revalorizarse, como sucedió con la explosión del ya jugador del Real Madrid.
Eso es, precisamente, lo que ha sucedido en España. Javier Tebas cometió el error de cerrar un acuerdo de larga duración por 990 millones de euros anuales hasta 2027. Ahora, con la llegada de la nueva estrella del conjunto blanco, la Liga no podrá aprovechar el tirón generado por Mbappé e incrementar el valor de la competición española durante las tres próximas temporadas.